Las ventas de inmuebles en Nueva Zelanda han sufrido una caída de 6,2% hasta junio. Ha bajado un 17% el número de las ventas de propiedades hasta un precio de 400 000 dólares neozelandeses, lo que son 352 554 dólares americanos. Por otro lado, las viviendas negociadas que tienen un precio mayor de 1 millón de dólares neozelandeses, han experimentado una subida impresionante de 19% para el mismo período. Se puede observar también un crecimiento de 6,5% de las viviendas vendidas a un precio de 600 000 dólares que tienen una cuota del mercado de 20%.

Los expertos creen que uno de los motivos que provocan estas tendencias en el sector inmobiliario, es la limitación en el acceso al crédito. Estas medidas fueron introducidas en octubre del año pasado con el fin de estabilizar los mercados de Oakland y Christchurch.  Otra razón por la que el mercado  está en la situación actual, es el desequilibrio entre los ingresos y los crecientes precios de los inmuebles.

Se considera que los compradores extranjeros tienen la culpa de esta falta de coincidencia aunque no hay datos exactos sobre el número de las viviendas adquiridas de parte de inversores no neozelandeses. Año tras año, el país es convierte en un destino muy atractivo para las inversiones internacionales.

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