Cada vez es  mayor la diferencia entre la oferta y la demanda de viviendas en Gran Bretaña. Según el estudio de Halifax, en el segundo trimestre de 2014, apenas un 5% de la gente piensa que en los próximos 12 meses  vendrá el momento adecuado de comprar inmuebles. En comparación, hace 3 meses este porcentaje fue 34. Esta es la mayor caída desde el inicio del estudio en 2011.

En los informes se constata que los precios de las propiedades en Gran Bretaña han alcanzado un nuevo máximo histórico. Como consecuencia, las viviendas son inalcanzables para muchos británicos. Más negativos son los ciudadanos de Londres y la gente del sudoeste del país donde el valor es más alto.

Las instituciones financieras adoptan medidas para detener la subida de los precios. El resultado de estas acciones es la ralentización de los precios por primera vez desde 2012.  Según algunos expertos se espera incluso una disminución del valor de las viviendas.

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